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Reza Pahlavi, hijo mayor del depuesto Sha de Irán, asistirá a los actos del Día de Conmemoración del Holocausto con el presidente y el primer ministro y hablará de sus esperanzas de un Irán democrático y de la renovación de los lazos con Israel.
Reza Pahlavi, hijo mayor del depuesto sha de Irán, Mohammad Reza Pahlavi, llegará a Israel este lunes en una visita histórica para asistir a los actos del Día de la Memoria del Holocausto con el presidente Issac Herzog y el primer ministro Benjamin Netanyahu. Se espera que se refiera a las amenazas de Irán en el acto nacional que se celebrará en Yad Vashem por la tarde.
Aunque muchos en Irán recordarían los días bajo el gobierno del Sha como una dictadura corrupta, Reza Pahlavi sigue siendo visto como la esperanza de los iraníes liberales y él mismo cree que su familia sigue siendo venerada.
En el último año, ha habido aunque pocas noticias de expresiones públicas de nostalgia por el gobierno laico, a medida que crecían la angustia económica y el malestar social en Irán.
El príncipe heredero iraní reside en Estados Unidos y llegará a Israel como invitado de la ministra de Inteligencia, Gila Gamliel. En una entrevista que concedió a Ynet en 2019, Pahlavi dijo: “En un futuro Irán democrático, que yo imagino, volveríamos a ser amigos.”
El Sha huyó de Irán a Egipto en 1979, en medio de violentas manifestaciones, que se toparon con una brutal fuerza policial, dando paso finalmente al surgimiento de la República Islámica. Murió de cáncer dos años después.
Su hijo estudiaba entonces en Estados Unidos y permaneció allí desde entonces. Tras la muerte de su padre, asumió el papel de cabeza de la familia real y dedicó su vida a oponerse al actual régimen de Teherán.
A pesar de la reputación del Sha en Irán, Gamliel se enorgulleció de la visita de su heredero y afirmó que era un primer paso en la reconstrucción de los lazos entre los pueblos de ambas naciones.
“Alabo la valiente decisión de visitar Israel por primera vez”, manifestó. “Representa un liderazgo alternativo a los gobernantes islamistas y un símbolo de paz y tolerancia en contradicción con los extremistas actualmente en el poder”, agregó.
“El pueblo de Irán busca un gobierno que respete su patrimonio, preserve los derechos humanos y honre la diversidad religiosa y cultural mediante, entre otras cosas, una relación pacífica y amistosa con Israel y otros vecinos de Irán”, escribió Pahlavi en un comunicado publicado por el Ministerio de Inteligencia.
“Millones de mis compatriotas aún recuerdan haber vivido codo con codo con sus vecinos judíos antes de que la revolución islámica desgarrara el tejido de nuestra sociedad. Rechazan el antisemitismo antiisraelí y asesino del régimen actual y esperan intercambios culturales, científicos y económicos con Israel. Un Irán democrático trataría de renovar los lazos con Israel y otros vecinos árabes. Creo que ese día está más cerca que nunca”, afirmó.
Pahlavi tiene previsto visitar una planta desalinizadora de agua para conocer la avanzada tecnología israelí en este campo, mientras que la infraestructura hídrica de Irán se está desmoronando. Además, visitará el Muro de los Lamentos y se reunirá con representantes de la comunidad bahai y con israelíes de ascendencia iraní.
